El futuro de las ciudades requiere de comunidades planificadas, sostenibles que garanticen todos los servicios básicos y brinden bienestar. Alejadas del ruido de la gran ciudad, pero con todas sus comodidades. Es decir se necesita una ciudad satélite.
Estas comunidades satélites se construyen para que sus habitantes consigan en ellas todo lo que requieren, disminuyendo al mínimo la necesidad de salir, haciendo que prácticamente salgan solo a trabajar o conseguir un servicio especial.
Por todas sus ventajas, este concepto se hace más atractivo entre los compradores y nuevas generaciones, quienes buscan una comunidad con el máximo confort. Esto ha hecho que las constructoras consideren cada vez más el construir una ciudad satélite para satisfacer las necesidades de sus clientes.
Si deseas ampliar los principios para construir una ciudad satélite, te recomendamos ver el siguiente video. En él, basados en el ejemplo de la ciudad satélite de México, se exponen los criterios usados para la construcción de estas comunidades:
¿Qué es una ciudad satélite?
De acuerdo a la definición de la Real Academia Española, una ciudad satélite es: “un núcleo urbano dotado de cierta autonomía funcional, pero dependiente de otro mayor y más completo, del cual se halla en relativa cercanía”.
En palabras sencillas, es una ciudad pequeña cercana a una ciudad más grande. Se trata de comunidades planificadas y construidas, para que dentro de ella sus habitantes consigan satisfacer sus necesidades primarias.
El objetivo de este tipo de comunidades o planificación es crear pequeños ecosistemas urbanos, para que las personas tengan en su cercanía escuelas, supermercados, servicios de salud, asistencia social, etc. y mejorar su calidad de vida.
¿Qué significa para el futuro de la construcción?
Las ciudades satélites son el futuro de la construcción. ¿Por qué? El urbanismo y el crecimiento de las ciudades se ha estado moviendo hacia allá por la necesidad de planear los proyectos para crear ciudades que garantizan mejor calidad de vida e inclusive mayor calidad ambiental.
En este sentido, una ciudad construida bajo el concepto de ciudad satélite posee en ella todos los servicios necesarios para garantizar el bienestar material. Ofreciendo servicios de aseo, electricidad, agua, salud, sanidad, educación, recreación, etc.
Además, como consecuencia de tener todos estos elementos disponibles, las personas consiguen tranquilidad y bienestar emocional. Por ejemplo, ya que se trasladarán por menor tiempo, estarán más conectados a sus intereses, gracias a que desde un principio, la ciudad se consideró para garantizar que se viva bien.
De igual forma, más satisfecho se sentirá el comprador si desde un principio se construye usando materiales y tecnologías que al combinarse brinden el máximo confort y conciencia de las necesidades actuales.
Como estos garantizan que se regule la temperatura interna y se reduzca el consumo energético, se vuelven opciones más atractivas para los compradores que actualmente siguen la línea de pensamiento de conciencia en el consumo y protección ambiental.
Otros beneficios para la calidad ambiental de las comunidades planificadas es que se garantizan servicios de saneamiento e higiene pues se construye la infraestructura necesaria para el correcto manejo de desechos, residuos y efluentes.
¿Qué ejemplos existen de ciudades satélite?
Las ciudades satélites construidas hasta ahora demostraron ser mejores que otros tipos de comunidades. Básicamente porque ponen a disposición de sus habitantes todas las comodidades necesarias para tener calidad de vida.
Te presentamos dos perfectos ejemplos de ello:
- Ciudad Satélite Maipú en Santiago de Chile. Comenzó a desarrollarse en 1980 como una ciudad planificada. Se creó como una alternativa residencial que procuraba que los residentes tuvieran cubiertas todas sus necesidades de servicios.
Los principales habitantes de esta ciudad son familias de estrato medio y medio alto, en su mayoría formadas por personas que buscaban escapar del ruido y contaminación de la ciudad.
A pesar de los años y los desarrollos nuevos, sigue conservando los criterios de planificación como ciudad satélite. - Ciudad Satélite al Noreste de Ciudad de México. Fue una de los proyectos urbanos mexicanos más importantes y ambiciosos del siglo XX.
Originalmente, fue concebida como una ciudad fuera de la ciudad. Fue un mega proyecto de desarrollo que inicialmente buscaba construir residencias para las clases bajas. Posteriormente, al culminar el proyecto, las residencias fueron adquiridas por personas de un nivel socioeconómico medio-alto y alto.
Con el pasar de los años, el crecimiento de la ciudad de México, terminó por alcanzar a la ciudad satélite, pero a pesar de ello, esta zona continúa manteniendo disponible todos los servicios característicos de este tipo de comunidad.
Actualmente la tendencia en construcción se rige por los criterios de las ciudades satélites. Los éxitos alcanzados con la planificación de ciudades, como la de Maipú y la Ciudad Satélite en México, han demostrado los beneficios de este tipo de desarrollo.
Beneficios de construir una ciudad satélite
De forma más detallada los beneficios de vivir en una ciudad satélite son:
- Zonas verdes y recreativas. Las ciudades satélites siempre tendrán hermosas áreas verdes y espacios recreativos cercanos a las zonas de residencia.
- Mejor calidad ambiental. Las ciudades satélites poseen todos los servicios y estructuras de saneamiento ambiental necesarios para asegurar un ambiente sano.
- Planificación urbana. Son ciudades planificadas en un 100%. Garantizando acceso a espacios públicos, infraestructuras, transporte y oportunidades de desarrollo.
Este último beneficio es uno de los aspectos más importantes de una ciudad satélite. De acuerdo a estudios en una ciudad que carece de planificación la productividad económica se reduce en un 40%.
Por todo esto, es importante aprovechar todas las características y beneficios de este tipo de ciudad para complementarlas con construcciones modernas. Utilizando materiales y tecnologías de construcción vanguardistas y de primera calidad.
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